martes, 28 de mayo de 2013

EL ATENTADO DEL GENERAL PRIM

Juan Prim y Prats (1814 - 1870)
     La Historia de España tiene episodios muy curiosos, algunos de los cuales aún no han sido cerrados completamente, otros están en proceso de serlo y a muy pocos se les ha dado carpetazo definitivamente. Todo esto viene al hilo de una noticia aparecida hace unos meses, consecuencia de una investigación histórico-criminal-forense sobre el cadáver momificado del que fuera Presidente del Consejo de Ministros, general Juan Prim y Prats (Reus, 1814 - Madrid, 1870). 
     Debo confesar que en mi época estudiantil me impresionaba este magnicidio por cuanto de trascendental tuvo en el devenir de la Historia política española, y debido también a las pocas pistas que se tenían sobre el mismo, pues nunca fue resuelto ni se llegó a capturar y poner ante la justicia a los culpables de aquel hecho. Pero todo esto era algo que, a día de hoy, ha cambiado rotundamente.
Francisco Serrano (1810 - 1885)
     Para explicarlo, me retrotraeré hasta 1868, cuando un pronunciamiento militar conocido como "La Gloriosa" (17 de septiembre) derrocó a la reina Isabel II obligándola a abandonar el país. Se abrió un período conocido como "Sexenio Democrático ó Revolucionario" (1868 - 1874), del que Prim junto con el general Francisco Serrano y el almirante Juan Bautista Topete sería protagonista, máxime tras la derrota de las tropas leales a Isabel II en la "Segunda Batalla del Puente de Alcolea" cerca de Córdoba (28 de septiembre de 1868). Tras esto, se formó un gobierno provisional encabezado por Serrano con Prim en la cartera de Guerra (Ministerio de Defensa), iniciándose la búsqueda, que duraría años, de un candidato idóneo dispuesto a ocupar el trono vacante de la monárquica España. Varios fueron los aspirantes, con diferentes apoyos internacionales cada uno, pero finalmente el elegido por votación en las Cortes (16 de noviembre de 1870) fue Amadeo de Saboya, hijo del primer rey de Italia Víctor Manuel II, que contaba como su principal valedor al general Prim, ahora aupado a la Presidencia del Consejo de Ministros que presidía el regente general Serrano. 
Grabado del momento del atentado al General Prim.
Su berlina se conserva en el Museo del Ejército.
     En este contexto y ante la inminente llegada a España del nuevo monarca, el 27 de diciembre de 1870, tras salir del Palacio de las Cortes (hoy Congreso de los Diputados) con dirección a su domicilio en el Palacio de Buenavista, la berlina que transportaba al Presidente sufrió un atentado en la Calle del Turco (hoy Marqués de Cubas). Dos carruajes bloqueaban la calle y varios individuos abrieron un fuego cruzado que hirió a Prim de gravedad. La versión oficial de su fallecimiento anunciaba que el día 30 de diciembre, a consecuencia de la hemorragia y la infección posterior, le sobrevino la muerte. 
     Sus restos fueron embalsamados y tras diversos avatares terminaron reposando en un mausoleo del cementerio de su localidad natal. De allí fueron exhumados el año pasado para proceder a su análisis, descubriéndose que la versión oficial aceptada hasta ahora sería falsa. Las heridas con que cuenta el cuerpo momificado del general le habrían provocado la muerte antes de los 3 días que se decía, pero lo más sorprendente es que su momia presenta surcos que hacen creer que habría sido estrangulado a lazo, tal vez para asegurarse de su muerte. Todo esto demostraría que los conspiradores que le mataron llegaron incluso a suplantarle durante esos 3 días en que se afirmaba que se debatía entre la vida y la muerte. 
Mausoleo del General Prim en el cementerio de Reus
     Con este estudio multidisciplinar asistimos expectantes a una prueba más de que la Historia no es un bloque monolítico, algo cerrado que no acepta modificaciones o discusiones. Por otro lado, se arroja luz sobre un hecho oscuro de nuestro pasado, además de apuntar directamente a quiénes fueron los autores materiales e intelectuales del atentado. 

miércoles, 15 de mayo de 2013

POSTALES ANTIGUAS (VIII)

Momento de la presentación de la obra en la pasada Feria del Libro
     Los que me seguís habitualmente sabéis que soy un enamorado de las fotografías antiguas, me gusta observar el aspecto de nuestras ciudades y pueblos hace décadas. Quizá tenga su punto de nostalgia, y que a alguien le resulte triste mirar al pasado, al patrimonio que desapareció con el tiempo por un mal entendido concepto de progreso. Pero la Historia no sólo es añoranza de lo que se fue, también es análisis para comprender el presente. 
     Toda esta divagación para contar que el pasado fin de semana me hice con un libro del mismo género que engrosará mi modesta biblioteca. Se trata de "La Huelva de Thomas y Roisin desde los inicios del siglo XX", una buena edición de fotografías sacadas del Archivo Municipal de Huelva con un fin solidario. Por la información que he podido encontrar, estos dos señores, que dan título al libro, fueron de los primeros editores de postales que hubo en nuestro país. Con su colección fotográfica se hizo una exposición el mes pasado.
     Después de leer y ojear detenidamente el libro, cosa que os recomiendo sobre todo si conocéis la ciudad onubense, he podido ver en sus páginas el pasado de la que fue una emergente urbe industrial y portuaria, también he recorrido unas playas casi vírgenes donde los veraneantes eran una rara especie que comenzaba tímidamente a poblar los litorales, y por último se hace más palpable su fuerte vinculación con América, no en vano, Cristóbal Colón partió de allí en su épico viaje descubridor. 
     Más adelante espero dedicar alguna entrada mostrando el antes y después de esos rincones de la ancestral Huelva.

jueves, 2 de mayo de 2013

EL 2 DE MAYO

"La defensa del parque de Monteleón". Joaquín Sorolla (1884)
     En ocasiones, de la forma más inesperada posible estallan acontecimientos que, con el andar de los siglos, se transforman en verdaderos hitos de la Historia de un país. Eso ocurre hoy, 2 de mayo, aniversario del levantamiento popular que tuvo lugar en el Madrid de 1808, invadido por los franceses y que constituiría el inicio de la conocida como "Guerra de la Independencia" (1808 - 1814). 
     Ese día, paisanos y soldados de la villa de Madrid se alzaron, de forma más o menos espontánea, contra las tropas napoleónicas que, so pretexto de invadir Portugal, habían tomado posiciones por la geografía hispana. Muchos mitos tomaron cuerpo aquel día, y muchos lugares y personajes quedarían  tildados con el calificativo de heroicos. 
"La carga de los mamelucos". Francisco de Goya (1814)
     En esta jornada, las iras contenidas durante semanas y meses se liberaron de forma explosiva. El levantamiento comenzó frente al Palacio Real cuando se producía el traslado de los últimos miembros de la familia real que quedaban en territorio español (Carlos IV y Fernando VII ya se encontraban en poder de Napoleón) y se extendió por todas las calles del viejo Madrid. Violentos choques entre paisanos y soldados imperiales tuvieron lugar en sitios tan emblemáticos como la Puerta del Sol. En el Parque de Artillería de Monteleón (hoy Plaza del 2 de Mayo), los capitanes Luis Daoíz y Pedro Velarde junto con varias decenas de paisanos resistieron un asedio que duró varias horas, hasta que los franceses trajeron refuerzos de entre las tropas que tenían acantonadas en las afueras de Madrid. Ese gesto les costaría la vida. 
Portada del libro homónimo.
     Mucho se ha escrito sobre estos acontecimientos, pero conjuntamente, artistas como Francisco de Goya inmortalizaron la situación legándonos para la posteridad cuadros como "La carga de los mamelucos" o "Los fusilamientos del 3 de mayo", de sobra conocidos, literatos como Benito Pérez Galdós también contribuyeron a la exaltación patria, éste con sus archiconocidos "Episodios Nacionales", o más recientemente, Arturo Pérez-Reverte con su novela "Un día de cólera". Por último, hasta el cine y la televisión se hicieron eco, sobre todo al conmemorarse el 200 aniversario de tales hechos. El aficionado tiene, pues, buenas fuentes de las que nutrirse.