EL EXPERIMENTO FILADELFIA

     Hace unos días recordé una película de los años 80, se llama "El final de la cuenta atrás" ("The final countdown"). Trata sobre un moderno portaaviones norteamericano en Hawai, que se ve envuelto en una extraña tormenta que lo transporta hasta el 7 de diciembre de 1941, la víspera del ataque japonés a Pearl Harbor. 

     Como buena película, tiene que estar basada en algo más o menos real, y conociendo vuestra afición por las historias extrañas o misteriosas, en este caso, quizá la película esté relacionada con el conocido como "Experimento Filadelfia". 

     Este experimento es algo que siempre ha sido negado por la Marina norteamericana, las informaciones que se tienen sobre él provienen del único y controvertido testigo, un tal Carl Allen. Siendo así, como os podéis suponer, es una de las delicias de los amantes de las conspiraciones. Dicho experimento consistió en hacer invisible un barco, el USS Eldridge, empleando para ello campos eléctricos y magnéticos. Según el mencionado testigo, sobre la nave se instalaron generadores y bobinas eléctricas capaces de crear campos electromagnéticos que curvarían las ondas de luz y radio alrededor del buque, haciendo que desapareciera por completo de la vista humana. 

     La versión del testigo afirma que el 22 de julio de 1943 el barco desapareció casi completamente cubierto por una niebla de color verdoso. Otra prueba el 28 de octubre lo hizo desaparecer por completo, sólo se vio un relámpago azul, mientras esto ocurría, testigos afirmaron haber visto al USS Eldridge a 600 km. de distancia durante 15 minutos, tras los cuáles se esfumó. 

     El mencionado experimento no debió de salir bien, a tenor de lo que afirma Carl Allen. Según esta persona, varios marineros desaparecieron, otros sufrieron mareos, algunos se volvieron locos instantáneamente o padecieron esquizofrenia y 5 aparecieron fundidos con la proa del barco, cuando no partes de su cuerpo se desmaterializaron, en cuanto a los demás, sufrieron amnesia. 

USS Eldridge

     Como veis, es una historia más digna de Iker Jiménez y su "Cuarto Milenio", pero no deja de llamar la atención que algo así pudiera haber sucedido. Con total seguridad, nunca se conocerá la verdad de un acontecimiento tan extravagante, quizá se tratase de un bulo, alguna forma de confundir a los posibles enemigos haciéndoles creer que se poseía una tecnología desconocida para ellos, o quizás tuviera algo de verdad. Que cada uno saque sus propias conclusiones.